miércoles, 4 de agosto de 2010

Por qué será tan difícil

El otro día leí un proverbio que venía a decir algo así como "Ningún camino, si se sigue hasta el final, lleva a algún sitio concreto. Prueba a subir un poco de una montaña para comprobar si, de hecho, es una montaña. Si subes hasta la cima de la montaña no podrás ver la montaña".




Podrás pensar que es una tontería, pero a mí (será por el momento de mi vida en el que estoy) me hizo pensar y empecé a darle vueltas. Llegué a la conclusión de que es verdad. Si has llegado hasta el final de algo (o crees que lo has hecho) corres el riesgo de darlo por sentado y dedicar tus esfuerzos a conseguir otros objetivos que tenías marcados ya que éste lo has conseguido y va a seguir ahí siempre.

¡Pues no! Puedes dar algo por finalizado y pasar a otra cosa cuando hablas de correr una carrera, de completar un puzzle de diez mil piezas o de pintar las paredes de tu casa. Es cierto que si ya has terminado no vas a seguir toda tu vida pensando en que tienes que acabar el puzzle. Pero con las personas es distinto. No puedes dar por sentado que tienes a alguien a tu lado y que va a seguir estando ahí cuando quieras. Que puedes hacer como que esa persona no existe (siempre que te interese hacerlo así) porque cuando te haga falta va a seguir estando. Las personas no somos un puzzle o cualquier otra cosa que puedas terminar y olvidar, porque las personas tenemos sentimientos, algunas sentimientos más profundos que otras, y necesitamos sentirnos importantes, valorados y queridos.

Parece ser que eso hay gente que no lo entiende. Hay gente que se borra de tu vida, aunque te diga que eres lo más importante que tiene. Pero lo que se dice y lo que se hace, al menos para mí, no son lo mismo y ambas cosas han de ir de la mano, no puedes decir una cosa y actuar de la manera opuesta. Hazte un favor y piensa en ello. A lo mejor tú eres una de esas personas. O a lo mejor no. Pero acepta mi consejo y párate un minuto a pensarlo. Que las personas que te importan no se cansen de ti y te borren ellas también de su vida por no haber sabido decirles lo importantes que son para ti (Y HABÉRSELO DEMOSTRADO CON TU ACTITUD). Y ojalá no pierdas amigos, familiares o a esa persona tan importante que hay en tu vida por no haber sabido conservar lo que tenías.

Después de un año sin escribir vuelvo un poco espeso. No seáis duros.

lunes, 15 de junio de 2009

¡¡MIEDO!!

El miedo me da miedo...

¿Tú me entiendes no? ya, claro... yo tampoco. Lo cierto es que nunca he entendido el miedo, quizás por eso nunca he tenido la sensación de sentir realmente el miedo en mi interior. Claro que me he asustado, sobre todo cuando era niño, de alguna noche demasiado oscura para mi gusto o alguna tormenta demasiado ruidosa. Pero no es a eso a lo que me refiero. Eso es algo que todos hemos experimentado alguna vez, pero no es el miedo al que me refiero. Me refiero al miedo.

El miedo es algo que te angustia , que hace mella en tu ánimo a la vista de un riesgo real o imaginario. O la aprensión que alguien siente a que le suceda algo contrario a lo que desea (al menos eso dicen mis amigos de la RAE). Miedo, para mí, es imaginarse una cosa cuando podrías vivirla... o ni siquiera imaginarla cuando lo único que puedes hacer es eso.







Son las razones que da tu cabeza para asegurarte que lo que opina tu corazón es irrealizable, inalcanzable o demasiado arriesgado como para intentarlo. Es la razón, fría y calculadora, frente al corazón, impetuoso y apasionado. Es la ansiedad del que siente, el que vive y desea pero piensa, medita y calcula cuando quizás no debería molestarse en hacerlo. O quizás sí...

Creo que esa es la razón por la que yo no tengo miedo. Me explico. No concibo la vida sin objetivos, sin metas, sin sueños que cumplir y que cada día o cada noche veo más cerca que el anterior (eso cuando me dejan), sin esas cosas por las que luchar y sin las cuales la vida sería gris. Y una vida gris, créeme, da mucho más miedo que intentar alcanzar la paleta que te permita pintarla de verde (llegados a este punto elija el lector el color idóneo sin más esfuerzo que el de sustituir la palabra verde en un sencillo ejercicio de abstracción por cualquier otro tono del espectro visible de los colores). Es por eso que no tengo miedo, porque las metas y sueños del mañana son mi vida hoy. Mis esfuerzos y sacrificios, que me hacen estar vivo hoy, traerán como recompensa las alegrías del mañana. Y para mí eso vale tanto la pena, merece tanto el esfuerzo que mi cabeza no tiene nada que decir. Si el corazón dice: a por ello. Adelante!

Porque... ¿de qué me sirve a mí tener miedo?

martes, 7 de abril de 2009

No puedo dormir...

Insomnio! Parece mentira que sea ese el maldito motivo que me lleva a escribir de nuevo en este olvidado blog. A veces no me entiendo. Envidio a la gente que escribe, que tiene ese don de hipnotizar a la gente utilizando tan solo sus palabras y su imaginación. Me hago un blog y me tiro meses sin pasar por él para acabar una noche a las 2 de la mañana aquejado de diversos problemas existenciales vertiendo mis chorradas en formato digital.

Supongo que lo triste sería pensar además que lo va a leer alguien. Valiente tontería!

Pues eso, que aquí estoy otra vez dejando fluir mi maltrecho cerebro a ver si sale algo interesante. Nótese para mayor enriquecimiento y disfrute del lector el hecho de que simplemente sitúo cuidadosamente las manos sobre el teclado y comienzo a escribir de forma aleatoria para dejarme sorprender por el resultado del citado insomnio.

A veces (de hecho casi siempre) pienso que soy un pardillo más. Otro de tantos. Le doy vueltas a la cabeza, elucubro y confecciono cientos de miles de cábalas, pensando en qué opinión tienen los demás de mí. Me enfado, me desvelo, me harto y me canso de cosas que luego no me atrevo a decir a la cara o al oído de aquellos que deberían escucharlas y me limito al cobarde papel del que tira la piedra y esconde la mano escribiendo para dar salida a la rabia contenida desde su ordenador. Lo gracioso, por otra parte, es que esa persona a la que le quiero decir mil cosas no pasará por este oscuro rincón en la vida. ¿Sabes que también escribo de vez en cuando? Lo sé, soy una caja de sorpresas. Todas baratas y muy vistas pero sorpresas al fin y al cabo.

Estoy desorientado, intento buscar en mi interior porque sé que es ahí donde se esconde el motivo de este malestar que me carcome poco a poco y que me crispa los nervios. Me gustaría saber qué debo hacer. Un par de palabras cuidadosamente elegidas que me ayuden a ver los motivos e intenciones de aquellos de quienes dudo. Sé qué tengo que decir, tengo buenos amigos que me aconsejan. ¿Por qué entonces sigo sintiéndome perdido y confuso?






¿A ti no te pasa eso de que quieres decirle algo a alguien, preguntarle alguna cosa o simplemente recriminarle alguna actitud y luego, a la hora de la verdad te callas y dejas pasar el barco? Es frustrante ser tan políticamente correcto que a veces eres tú mismo el que provoca o magnifica tu propia preocupación. ¿Qué más me da a mi que se enfaden conmigo, que me griten, que se decepcionen y que pasen de mi culo? ¿Cuándo me ha importado la gente? Me jactaba de ser autosuficiente... No me importa lo que piensen de mí, no me importa el qué dirán.¿Por qué entonces no me atrevo a decir esas cosas que me corroen las entrañas y no me dejan ni siquiera dormir un rato? ¿Cuál fue ese maldito momento en el que me di cuenta de que hay personas que te importan tanto que prefieres callarte y pasarte una noche en vela dándole vueltas a tus pensamientos antes que abrir la boca y estropearlo todo?

jueves, 30 de octubre de 2008

Hoy es uno de esos días...

Hoy es uno de esos días. Un día de lluvia, gris y húmedo. Pero parece que la tormenta ha empezado dentro de mi habitación y me ha seguido hasta la calle. Me extraña que no llueva dentro del vagón de metro en el que llevo metido los últimos veinte minutos. Y es que es así como me siento, gris y apagado. ¿por qué ayer hizo un día de Agosto y hoy hace un día de... perros?


Sí, hoy es uno de esos días. Esos días en los que te levantas sin ganas de nada, por inercia, en los que te quedarías metido en la cama dando vueltas, sin dormir, esperando que pase el tiempo y que mañana todo vuelva a ser normal.

Hoy mis miedos me rodean, mis fantasmas me persiguen y las sombras que suelo ver en sueños hoy van sentadas a mi lado de camino a la universidad.

En días como hoy haces cosas por inercia, porque sabes que se supone que debes hacerlas. Aunque no te enteras de nada vas a clase y te sientas esperando ansioso a la siguiente hora para que quede un poquito menos... un poquito menos para que llegues a casa, un poquito menos para que se acabe el día y todo este extraño ambiente se vaya con él.

Sí, definitivamente hoy es uno de esos días...

martes, 14 de octubre de 2008

UFFFF!!!!! hacía mil años... ¬¬

Estoy vivoooo!!!!



Lo digo para el que no lo sepa, si alguien se limita a leer este blog para saber de mí ha de pensar que llevo muerto cerca de 3 meses. Lo cierto es que las recuperaciones de septiembre, la selectividad, la pre-inscripción de la universidad, la mudanza, la presentación de la universidad, la matrícula de la universidad, la universidad de la universidad de la UNIVERSIDAD!!! la galbana, la pachorra, la desidia, el abandono, la acidia, la apatía, la desgana, la indolencia, la pereza, la holgazanería y la vagancia más pura me obligaron a no pasar por estos lares en muuuuucho tiempo.

De hecho creo que la mayoría de mis lectores ¡de todos los tres de ellos! (esto es... al menos dos) habrán olvidado a estas alturas que me dedico a derramar mis chorradas en este blog. Madre mía ¡qué torpe estoy hoy! ¿eh? parece que no he escrito en la vida. Demasiadas fórmulas y poca literatura.. necesito una biblioteca!! JAJAJA.

Tras esta solemne sarta de chorradas espero dedicar un ratito de vez en cuando, ahora que mi vida parece que se ha vuelto a estabilizar y me regala tiempo para hacer tonterías como ésta, a escribir unas líneas y manteneros informados de las estupideces, sin sentidos, veleidades y demás zarandajas que surcan mi cerebro constantemente.

Espero ansioso comentarios criticando, juzgando, cuestionando, reprochando o justificando el que lleve tantííísimo tiempo sin pasarme por aquí (si no criticáis eso al menos criticad la extraña manía que parece haberme entrado de enumerar sinónimos y palabras relacionadas).

PD: entrada dedicada al biólogo, al físico y al veterinario en ese orden o en otro que consideréis más lógico y justo en función de la estima en la que os tengo, vuestra capacidad intelectual, vuestra edad, la distancia a la que os encontráis todos de el polo norte geográfico en este mismo instante o el número de pelos de vuestra nariz. MALDITAS ENUMERACIONES!!! ¬¬

jueves, 12 de junio de 2008

"DIFERENTE"

Aquí estoy de nuevo. Aunque en realidad no se trata sino de un comienzo más porque no hace ni tres horas que publiqué mi primera entrada. Son las tantas pero un extraño insomnio me asalta, creo que le he cogido el gustillo a esto de escribir, Mis neuronas, si acaso queda alguna de ellas ahí dentro, se agitan esperando que escriba en este blog lo que transmiten entre sí a gran velocidad. Como diría el sabio: "Va a ser un problema de neurotransmisores."

Bromas aparte creo que hay temas que son recurrentes en mi cabeza. ¿Crees que menosprecio a aquellos que pasan desapercibidos? No lo hago, al contrario, animo a esa gente que aún no se ha atrevido a que demuestre que puede aportar algo más. A que también puede ser diferente si se lo propone.

"Diferente"

No me gustaba esa palabra. En parte porque conozco de primera mano lo que es ser criticado por serlo. Ser criticado por tus gustos o aficiones, por tu actitud ante la vida, por tus valores éticos y morales, por tus creencias religiosas y políticas (más bien debería decir apoliticas)... Sé lo que es estar al otro lado del largo dedo acusador y ver cómo te critican por lo que haces, dices o piensas sin que puedas hacer nada por evitarlo. ¿Y qué? No me importa lo más mínimo. Creo que ahora entiendo la palabra diferente de otra forma.






Concibo el hecho de ser diferente como algo bueno. Las personas a las que aprecio son "diferentes", la gente en la que me fijo es "diferente" y yo mismo a veces me considero "diferente." Porque estoy harto de "moreno ressshulasso", de "rubika fiesteraAaAaAa" y demás fauna ibérica que se acumula en las redes sociales de Internet. Y lo digo sin acritud, pero últimamente observo una avalancha de personas paralelas, con vidas paralelas y personalidades paralelas. Y esto me entristece. Hay veces que tengo la sensación de haber visto a la misma chica veinte veces mientras doy un paseo, o haberme cruzado con el mismo chaval otras tantas cuando voy a hacer la compra. Este sistema cuadricula a la gente de una manera cruel y despiadada. Solo se salvan de la quema... los "diferentes."

Esa persona que te hace girar la cabeza cuando la ves por la calle pero no por sus curvas interminables o por sus grandes bíceps, sino porque te impacta ver a una persona así. Te choca ver a alguien que desafíe al sistema y se atreva a vivir bajo su propio criterio. Alguien que tiene personalidad y no se deja arrastrar por la corriente. Piénsalo... piénsalo...

¿No te gustaría ser "diferente"?

miércoles, 11 de junio de 2008

Mi comienzo como blogger

Dicen que todos los comienzos son difíciles... ¿En serio? Dudo solemnemente que haya algo que sea difícil de comenzar si te gusta de verdad. Mi gran problema es que 17 años después todavía no sé qué es lo que me gusta realmente.

Hacer reír. Hacer reír me encanta. No se si es esa sensación de que por un momento, sin importar lo pequeño que sea éste, todos te regalan unos pocos minutos de su vida en forma de atención ¡Ser el centro de atención! No, eso es demasiado, pero creo que, en esa búsqueda en la que todos (ya sea consciente o inconscientemente) nos embarcamos más tarde o más temprano, intentando que los demás nos acepten (porque, seamos realistas, a nadie le gusta sentirse rechazado) contar con la atención de los demás es esencial.

Las personas que nunca consiguen captar la atención de los demás pasan como sombras en las que nadie se fija. Personas normales como tú y como yo pero con el dudoso privilegio de la invisibilidad. Personas condenadas a un ostracismo que quizás no se merecen... o quizás sí. Cada persona es un mundo y cada caso muy complejo para que mi humilde pluma (aunque ahora teclado) lo analice objetivamente.

Eso me aterra. Pasar desapercibido. Pasar de puntillas por mi propia vida... como un personaje en el que nadie se fije. El mero hecho de imaginarlo me hace sentir vacío. Pero que los demás te regalen su atención conlleva riesgos. Supongo que como casi todas las cosas en esta vida, ¿no?

Te arriesgas a que los demás te juzguen por una sola pincelada, por un chiste, una mueca, un gesto, una mirada, una expresión o un comentario poco o nada afortunado. Te arriesgas, repito, a que los demás crean que eres una persona vacía, como esas que tanto temo, que quiere abandonar su condición de actor de reparto para convertirse en un improvisado protagonista al que nadie ha llamado a escena. A que piensen que eres un ser simple, de esos que te encuentras a patadas cada minuto. A que te vean como a tanto otro personaje de figurín cuyo único objetivo en la vida es "menudo pedo nos pillaremos el sábado", "me enrrollaré con 20 tías este finde", "mira mis zapatillas de 200 euros que le han costado a mi padre 6 horas extra" o "para qué voy a estudiar si soy tan guapo que los demás me veneran aunque no tenga nada dentro de la mollera"... aunque tú sabes que no es así.

Sabes que eres diferente y que, si te dejan, puedes marcar la diferencia. Incluso sabes que puedes ofrecer algo más. Es más, sabes que tus profundas inquietudes, intereses y valores te hacen resaltar entre la multitud y resultar más interesante que otros, ofrecer mucho más a aquellos que estén dispuestos a aceptarlo. "Stand out from the crowd."

Quizás esta digresión en forma de blog no sea más que eso. Otra forma de las muchas que uso para llamar la atención. Para expresar todas esas cosas que me hacen diferente y que no me atrevo a decir. O para decir todas esas cosas que me hacen diferente y que me muero por expresar.

Como digo arriba, justo bajo el título... espero que no os empalague demasiado...